SUENO DE UN PARAISO

SUENO DE UN PARAISO


Pensaba en un castillo de oro con ventanas de plata remachadas con perlas de ofir, rubíes y jaspe. Un sueño dorado en el que nunca despertaría. Una cama de reposo sin igual. Almohadas de plumas bordadas con hilos de seda. Zapatos de marfil. Un traje de príncipe al que todos envidiarían con tan solo mirarle Un corazón bonda- doso, lleno d amor, paz y templanza, una armonía sin igual par todos. Un reloj de mármol, en el que el tiempo no pasara jamás, y convirtiera la vida en juventud eterna, y sus agujas serian las cómplices para detener el tiempo en un espacio inigualable. Los jardines de un verde pasto con los bordes de sus hojas plateadas. Las flores de todos los colores, formando un arco iris en el que las mariposas, jugaran segaran los ojos de quienes miraran este lugar por el brillo, por el brillo reflejado de sus alas con el sol. Una orquesta de aves que durmieran al mas torpe con su lindo trinar. Un bosque multi espeso, y enredaderas de todo tipo formando jardines colgantes, colmados de blancas campanas, al dindon del viento. Pasaba un río azul cristalino, en e que los peces de colores hacían una danza amorosa para todos. El dolor no existía. Todo era tranquilidad y amor. Una esposa que seria la princesa de todo el palasio.Su sonrisa, y comprensión serian el principal adorno del lugar. Su delicadeza reluciente cubierta de un vestido blanco, con adornos de las nubes como en los cuentos de adas. Sus zapatitos de cristal, roza con lazos a los lados de transparencia. Al sonreír el esmalte de sus dientes junto al agradable aroma de su aliento, acogerían a cualquiera, sin el más mínimo esfuerzo. Su bondad traspasaría los límites de la misericordia. Aquel palacio, tendría un rey que construiría un hogar lleno de niños, quienes serian los principales lirios del jardín. Inundarían todo el lugar al correr por doquier, repartiendo la alegría. Un rey sonriente, a todo momento. Las luciérnagas adornarían las noches. Estrellas fugases, que rayarían el cielo, con pinceladas cruzando el firmamento de un lado al otro. La luna plateada, como un gran diamante, a quien todos contemplarían. ¡Que hermoso que felicidad!
Tantos amigos trabajadores, con el hombro dispuesto a apoyar cuando tal vez algo me agobiare. Podría reunir una pequeña fortuna para echarle una mano a toda mi familia. Mi madre quien estaría sentada en un sillón al atardecer esperando su hijo para darle un beso de bienvenida. Si la realidad se hubiera tornado de esta forma, diría que el paraíso seria aquí en la tierra, pero la dura realidad es que en tan solo diez anos se ve lo que se ha convertido e una realidad. ¿Cuánto tiempo a pasado? Apenas tenia veinte años, era la flor de la vida, en las manos, la cual ahora lentamente desapareció. Sin poder retenerla se ha comenzado a desliar para escapar u ver que puede hacer por otros lugares. Han comenzado a salir algunos reflejos de la vejes, llamados canas. A penas puedo pasar el peina por mi cabeza pues muchos de mis cabellos se han molestado conmigo y han preferido abandonarme. Aquellos huesos duros y robustos que barias veces se quebraron en diferentes lugares del cuerpo, y que se soldaban inmediatamente, comienzan a renegarse a ello. Pues cuando los asota el frió duelen en las fisuras ya soldadas. Los tendones y nervios que se aforraban con firmeza, sin quererse soltar, ahora son como frágil tela de araña, también se niegan y engarrotan, para apenas mover un poco los dedos. Esa en un de las maneras en la que pueden sacar una que otra melodía, en la vieja guitarra. ¿Qué surgió, qué pasó en realidad?
Todos han traicionado las manecillas del reloj, de mármol con ganas de escapar de mi presencia. Han quebrado el pacto, la alianza que hicimos un día. Se alejaron tanto que los diez anos pasaron como un segundo. Aquellos amigos que aparentaban ser hermanos, parte de la corte real, se convirtieron en los peores enemigos. Todos pensaron en ellos, no les importo mi dolor, ¡nada los conmovió! Aquel sol radiante que matizaba el candor del azul celeste, se puso turbio y relampagueante. La familia a quien contada por teléfono a menudo, fue quedando como un eco vacío. La imagen de su silueta, se ha ido borrando casi al borrarse, y solo queda un viejo cuadro empañado como recuerdo en peligro de extinción. He ido perdiendo las fuerzas el deseo de hablarles. Algo se va enfriando, poco a poco. Tengo miedo, los amigos en realidad nunca lo fueron, solo eran personas egoístas, que vinieron por un momento para después desaparecer, como las horas del día para ya no volver jamás. Los hermanos fueron hechos solo a la voluntad de DIOS pues no tuvimos la oportunidad de escogerlos, y ni siquiera de decidir si los queríamos o no, y tampoco el color que debían de tener, o si nos gustarían. Ellos vienen según salen del vientre de la mama. Aquel padre que siempre soñé fue un fracaso, pues cuando un par de veces pensé que aquel par de regalos que me dio eran una hazaña de un héroe, que quería a su hijo, poco a poco me fui dando cuenta de que solo había hecho lo que le pertenecía, lo que en el deber eran la obligación y necesidad hacer. Los hijos solo somos lo que es la voluntad de DIOS porque no pedimos nacer, ni como tampoco. Solo somos como vinimos y es todo, no podemos escoger ni los padres ni en que lugar del mundo nacer tampoco. Vinimos al mundo porque así lo quiso DIOS y punto.
En las reuniones de la escuela siempre estuvieron ausentes mis representantes, mi apoyo. Aquello que debía impulsarme, a luchar u seguir adelante nuca estuvo presente. ¿Donde estaban los héroes que tienen todos los niños? Por ejemplo mi padre nunca lo conocí como tal. Creo que mis padres no estaban preparados para tener criaturas que tienen un gran sueno para vivir. Ya de grande comprendo todo o casi todo gracias al DIOS de la misericordia.
Por las calles anduve u dormí bajo el manto azul estrellado. Solo existía un gran vacío para mí. La soledad aparecía en el camino como si fuera ese mi destino. Día a día arriesgaba la vida, era o ganarla o perderla. Tratándole cruzas un océano desconocido, legar a una tierra lejana por la que la aventura es el único detonante. El hambre abrazaba mi estomago u lo apretaba con grande furia. Estiraba todas las viseras, órganos u intestinos. Los ácidos destrozaban mi boca y garganta. También perforaban las paredes del estomago formando así ulceras, que quien sabe si algún día sanarían o llevaría las secuelas por toda la vida.
¡Como añoré aquel hogar del amor, y felicidad deseado! Aquella armonía que debería haber en casa (pero) ¿Dónde estaban todos? ¿Cómo podía hacer para recuperar algo del viejo cuadro de recuerdos? No había nada los niños nunca existieron, nunca crecieron las flores y el bosque desapareció, para nunca mas volver.
Todos se acercaban con la intención de recibir algo de mis manos. Nunca aparecía el superman que lidiaría contra mis problemas, a no ser que fuera Jesús. Las bebidas no fueron el aliento para olvidar, o borrar las desventajas. Sin embargo alguna fuerza me impulsaba, dentro mí, para abalanzarme a un mundo incierto.
hace tres meses sobre n barco en el mar junto a otros ocho supervivientes amigos, que parecían quienes debían estar presentes. En especial uno de ellos quien estuvo en porción conmigo. El sufrió hambre, sed y muchas cosas junto conmigo, y otras muchas cosas. Este es con quien compartía mi pan para darle de comer un treinta y uno de diciembre, estando en la prisión, en un año que no quiero recordar. En este fin de año para las doce de la noche, compartía con el lo único que tenia para comer en aquel tedioso lugar, unas pocas cucharadas de pinos de maíz. Esto era lo único que aliviaba el hambre aquel día en el que todavía no nos habían dado nada de comer para esperar el año nuevo. Que ironía ¿Quién estará esperando un ano nuevo con el corazón en la mano y el estomago echo pedazos del hambre? Ese amigo me dio las espaldas para nunca más volver a confiar en él nunca más. Un día estando en Miami y sin tener donde vivir. Cuando guardaba mis pertenencias en una casa, en el North East de Miami Florida; dejo lo único que yo tenia, marchándose a otro lugar. Después de perdonarle esto, se caso con alguien, que le impidió la relación de amigos que teníamos. ¡Que ingrata es la vida! ¿Cuál es el afán de esta? Como dijo Salomón ¿De que le vale al hombre granjear el mundo y perder el alma? La prisión me hizo visitarle varias veces. Unas veces por mi culpa y otras siendo inocente. Todo para borrar la imagen de un pais al que pensaba era el ejemplo a seguir para todo el planeta tierra. Es un fracaso todo lo que le rodea. Los tales soldados que luchan por un dicho ideal de honestidad y libertad. Que decían estar allí para disciplinar al malo, lo corrompían más. ¿Cómo despertar de aquel sueno? ¿Cómo remover al universo para encontrar una gota de esperanza y justicia? Esta última no existía en ninguna parte. Todo es una gran farsa. Señoras de la alta sociedad, tan corruptas como la policía y el gobierno, dispuestos a hacer cualquier cosa, por tal de ganar, la meta que se proponen. ¿Qué decir de todo esto? ¿Cómo regresar al lugar de nacimiento? Donde había escapado por no estar en la prisión injustamente. En un lugar donde no se permite ni siquiera abrir la boca para hablar. Solo para masticar el bocado de pan que con tristeza y sacrificio se puede conseguir a diario. Si te quejas o abres la boca para reclamar algo, de la mala administración, del tirano Castro, pereces en la lucha o te matan de hambre o en prisión. ¿Para que regresar? ¿A buscar qué? La fachada de bondad y verdad del sistema desapareció de mi mente totalmente.
Aunque el mundo parece estar perdido, no lo esta. Existe un sueno de amor paz y alegría. Todos podemos soñar con aquel lugar, que es realmente verdadero. Allí no existe dolor, hambre, frustración, desaliento; no nada de eso. En el lugar de la paz. En la ciudad del sueño paraíso, existe total armonía, alegría y una paz inmensurable. El pan de cada día se gana con amor. Las gentes que viven en ese lugar, luchan todas por el bienestar de los demás. Las calles son de oro puro. Las casas son mansiones humildes. Todos se alegran de la felicidad de los demás y desean que todos lo sean. Hay un rey que se complace en dar a todos lo que les hace falta. Cada sábado y cada mes se reúnen todos los habitantes para celebrar la alegría y para alabar al Rey de reyes y Señor de señores. ¡Que bonito es todo, que hermoso! Los ríos son cristalinos. Los árboles son copiosos, y muy verdes. Los pastos son jugosos al paladar de las bestias del campo. Las aves toas traen un nuevo cantar cada mañana. Los amaneceres son radiantes y coloridos. Las flores de aquel lugar no se marchitan. Los peces saltan de alegría porque en el fondo de las aguas todo es alegría, ninguno se come a otro. La brisa es un sedante. El cielo es azul incomparable. Todos juegan cada día, y dan gracias a su rey, quien los liberto de la peste, hambre, enfermedad, tristeza, y los llevó a aquel paraíso. Existe un árbol, que da un fruto nuevo cada día. Este sirve para prevenir las enfermedades y mantener la salud, eternamente. Los padres no abandonan a los hijos. Las madres se deleitan en amar, y dar todo por los hijos y los esposos. La obediencia de los hijos es genuina. Todos son inteligentes. Todo es pura felicidad. No existe ninguna fabrica que contamine el ambiente, y el oxigeno es perfecto. Las frutas son jugosas, sin preservativos. Los alimentos son sanos y censillos. No hay enfermos. La salud es total, porque todos se preocupan por ella. No hay gordos ni flacos. Los seres de ese lugar están en una forma total de salud y físicamente bien formados. No hay envidia, ni rencor. No existe el divorcio, ni la división de las familias porque DIOS las hizo con la seguridad de que permanezcan para siempre.
Este lugar es la tierra nueva que DIOS va a crear, cuando Jesús regrese. Pero es cierto que aunque El no haya venido aun, esa armonía y felicidad si puede existir aquí. El cielo y la paz no son un lugar, sino el tener a Jesús en el corazón y presente cada momento y donde quiera que estemos. El mejor lugar del mundo es a los pies del salvador.